La técnica del par biomagnético o
biomagnetismo fue creada por el Dr.
Isaac Goiz.
Se aplican imanes de alta potencia
en diferentes puntos concretos del
organismo para equilibrar reacciones
bioquímicas y niveles de pH que son
los que provocan afecciones
Es una técnica no invasiva, sin
efectos secundarios y cuya única
precaución es la de no tener prótesis
sensibles al magnetismo o implantes
electrónicos, cuyo funcionamiento
puede verse alterado ante la presencia
de los imanes.
Son necesarias varias
sesiones
Usualmente se necesitan tres
sesiones como las que acabo de
describir, separadas una semana
cada una, para obtener resultados.
Así que ten paciencia, con una
sesión solamente no esperes
obtener resultados inmediatos. Los
milagros no existen, al menos en
las terapias naturales… Existe la
perseverancia.
Lo primero que haremos será un
rastreo: Se hará una revisión corporal
punto por punto con el imán, hasta
recorrer los 160 que encuadran la
técnica.
Acto seguido, y una vez
identificados los pares (cada punto
realmente es un par Positivo-Negativo
que necesita un imán por cada uno),
se colocarán los imanes que se
necesiten. A eso lo llamamos impactar.
En esa situación esperaremos unos 40
minutos, tiempo en el que estarás en
una camilla, relajándote.
Por último, con una rápida
revisión, llamada repolarización,
verificaremos que los niveles
energéticos se han compensado,
acabando así la sesión.
Integrado en la Cooperativa BIOSANA
Formada directamente por
el Dr. Goiz
En 2014, tuve la gran suerte de
participar en un curso de
Biomagnetismo impartido
directamente por el Dr. Goiz.
Aprender cualquier técnica
directamente de su creador es un
privilegio. Y este caso no fue una
excepción.
Estoy registrada como
terapeuta oficial; en la web oficial
de Biomagnetismo podrás encontrar
el directorio mundial de terapeutas,
que puedes consultar aquí.
Asimismo, en esa dirección
podrás leer unas interesantes
recomendaciones a la hora de elegir
Biomagnetista. ¡Siéntete libre de
elegir terapeuta!
Sobre los imanes
Hay varios tamaños de imán
dependiendo de la zona que se vaya
a impactar.
Usualmente son de Neodimio,
con gran potencia, superando los
1000 Gauss. Para poder
manejarlos, están forrados de cuero
y el color del mismo marca su
polaridad Positivo-Negativo. El
hecho de estar forrados también es
por protección, ya que su gran
fuerza hace que puedan colisionar
con violencia entre ellos cuando
están próximos. Hay que
manejarlos con precaución para no
pillarnos los dedos…